Desde mucho antes de entrar en la escuela, los niños/as tienen contacto con el entorno letrado que los rodea. A nuestro alrededor se encuentran carteles, revistas, catálogos, logos, marcas, y páginas web, que el niño/a mira e incluso interpreta desde bebé.

       Por eso no hay que tener miedo en iniciarlos en la lectoescritura. Es la sociedad la que hace que se integran en el mundo alfabetizado.

       Hay un documento muy enriquecedor, fue elaborado por el equipo de infantil del CEIP JUAN BAUTISTA IRURZUN, en él plasmaron sus experiencias referidas a la lectoescritura desde una perspectiva constructivista. A mi me ayuda mucho, e incluso tengo pequeñas partes fotocopiadas y expuestas en mi tablón del aula, siempre a la vista. De hecho, la tabla que expone las fases por la que pasa un niño/a en su aprendizaje de la lectoescritura, está siempre pegada en mi mesa.

   Últimamente, este es el juguete estrella de la clase. Les encanta y piden cada día poder cogerlo, tanto que hay que hacer turnos. Tiene letras móviles de colores, lo cual facilita el acercamiento al sonido de cada sílaba. Además son piezas encajables, es decir, si la letra no es correcta no encaja, lo cual les permite autocorregirse de forma independiente. Muy útil también para trabajar en equipo y favorecer el trabajo cooperativo. Por ejemplo, cada niño/a del equipo pone un letra de la palabra siempre con ayuda de los demás. Muy recomendable para pedir a los Reyes Magos estas navidades. Se llama "Yo aprendo a leer" de DISET.

ALGUNAS ACTIVIDADES PARA TRABAJAR EL NOMBRE PROPIO:

 PASAR LISTA CADA DÍA

      Desde el principio de la escuela, a los tres años, el nombre de cada alumno y alumna debe estar presente en el aula y ocupar un espacio importante: la lista de alumnos de la clase; señalar la percha, las carpetas o el lugar donde guardan sus trabajos.

      No se trata únicamente de mirar los nombres propios escritos en el aula. Se trata de leerlos (reconocerlos), y escribirlos: al pasar lista, al repartir el material, al ver los que faltan, o están ocupados en algo especial, etc.

         En ese camino realizamos actividades variadas:

• Escribir su nombre en su hoja de trabajo.

• Buscar en los cuentos de la biblioteca de clase palabras que empiecen por su inicial.

•  Componer el nombre con letras recortadas.

• Recortar letras de los periódicos para formar su nombre.

• Ordenar de las letras que forman su nombre.

• Reconocer las letras de su nombre.

• Realizar el nombre y un dibujo de un compañero de clase.

• Identificar letras iguales en los nombres de los compañeros de clase.

• Comparar los nombres de los compañeros de mesa.

• Diferenciar nombres correctos e incorrectos.

• Relacionar fotos con nombres de los compañeros y compañeras.

• Realizar el nombre con plastilina.

• Lectura del nombre en diversos trabajos realizados.

• Reconocer algunos nombres de la familia

• Identificar algunos nombres de personajes de la televisión.

• En pequeño grupo, dejar varios nombres a la vista y que cada uno busque el suyo.

• Hacer clasificaciones con los nombres:

– largos-cortos;

– los que comienzan y acaban igual

– los nombres simples o compuestos;

– palabras que comienzan o acaban por una letra determinada de un nombre, o la contienen.

• Señalar los nombres de los de su mesa.

• En un folio ir escribiendo su nombre para hacer una lista. Una vez hecha la lista preguntar si alguien reconoce algún nombre, si dicen que si que escriban los que reconocen.

• Mostrar dos etiquetas, una el suyo y otro y adivinar de quién se trata.

•  Los niños deberán adivinar cuál es el nombre a partir de la información que dé el adulto. Las consignas pueden ser:

– es el nombre de un niño

– comienza por...

– acaba por...

– sigue por...

• Pedir a los niños que escriban su nombre; si no lo saben escribir, lo hará el adulto. Luego hablar de la composición del nombre. Ocultar parte del nombre y preguntar qué pone.

• El adulto  va escribiendo poco a poco el nombre de uno de los niños y ellos tienen que adivinar de cuál se trata. Poco a poco se irán agregando segmentos silábicos del nombre.

• El adulto  dice dos nombres, luego pregunta si se parecen. ¿Se parecen cuando los escribo? (Escribirlos). Justificar en qué se parecen o por qué no se parecen.

•  Copiar sus nombres utilizando sus tarjetas. Trascribir sus nombres con letra convencional delante de ellos.

 Hace tiempo, buscando por los blogs, encontré este recurso que utilizo mucho, sobre todo el los niveles de 4 y 5 años. Tiene varias utilidades: leer, completar con letras móviles, escribir con rotuladores; depende del grupo y la actividad, se puede hacer un uso u otro. No se quién lo realizó, desde aquí como siempre, gracias por compartirlo.